viernes, noviembre 21, 2014

Ejercicio de validación

Estoy intentando identificar mis sentimientos, en especial los negativos, para que cuando sepa cuales son exactamente, pueda validarlos, darme permiso de sentirlos y después cambiarlos a algo positivo. Y así empiezo...

¿Cómo me siento?

Me siento frustrada, un poco triste, como si hubiera hecho algo malo, queriéndome explicar y con ganas de que validen mis razones, que me digan que está bien lo que hice.

¿Por qué?

Ayer fue a una fiesta, llegué temprano y me fui antes de las 11:30 p.m. No me siento a gusto en las fiestas, siento que no encajo y me es difícil empezar conversaciones de la nada con personas no tan desconocidas. Ese tipo de situaciones me hacen sentir incomoda. También el hecho de que estaba cansada hace que la incomodidad sea mayor, como si automáticamente el cansancio me pusiera en un estado mental negativo y difícil de manejar.

¿Puedo cambiarlo?

No, es algo que ya pasó. Pero puedo tratar de cambiar el cómo me siento ahora al respecto, validarme a mí misma que lo que hice está bien para mí.

¿Quiero cambiarlo?

Sí, me siento incomoda en mi piel, siendo yo.

¿Qué otro punto de vista puedo tomar al respecto?

Que tal vez no es lo mejor que pude haber hecho, pero no vi como necesario tomar más precauciones acerca de la fiesta, cansarme menos durante el día para aguantar más en la fiesta o poner un poco más de esfuerzo en socializar. En este momento no me siento con ganas de socializar y conocer personas, me siento con ganas de lo ya conocido, ser reconfortada por los sentimientos que ya sé cuáles son y me hacen sentir segura, adecuada.

No es necesario que alguien me diga que lo que hice está bien, yo sé que fue lo mejor para mí, para mis necesidades, mis horarios… aun así me siento frustrada por no poder aprovechar más de ese tiempo o no tener más energía. Pero si quiero estar al 100% para el siguiente día, rendir en mi trabajo, en los entrenamientos, estar atenta a mis pensamientos tal y como quiero estarlo, necesito descansar, dormir mis 6 o 7 horas diarias entre semana, aunque eso signifique no poder pasar tanto tiempo con mis amigos.

A veces me enojo por que ellos tienen actividades y fiestas a las cuales me gustaría asistir pero que me parecen muy difíciles, ya sea por la distancia o porque tienen sus horarios menos controlados, o mejor dicho más caóticos, no los puedo adaptar a mis planes con facilidad. Me frustra no poder adaptarlos pero también no quiero renunciar a mis horarios, a mis planes, porque hasta ahora me mantienen centrada, feliz y al tanto de los aspectos de mi vida que quiero mejorar. Tal vez las amistades nunca han sido mi punto a desarrollar.

Debo incluir que las demás personas no tienen la culpa de como me siento, así son ellos y debo aprender a quererlos y respetarlos por como son, por como llevan su vida. Yo debo aprender a diferenciar que yo soy la que importa, yo decido que me afecta y que me hace crecer.

No hay comentarios.: